Perú: ¿Cuál es el estado del sistema público de abastecimiento de medicinas?
Nuestro país sigue enfrentado grandes desafíos en salud, especialmente en el sistema de abastecimiento de medicamentos. Sin embargo, ¿existen soluciones para acortar esta brecha que evita mejorar el acceso a salud de calidad? Conoce algunas medidas clave planteadas por expertos.
Pese a que el 91.7% de peruanas y peruanas cuenta con un seguro de salud a través del Estado (principalmente EsSalud y SIS), de acuerdo a un reciente estudio de Apoyo Consultoría, el 95% de ellos debe optar por adquirir sus medicamentos en farmacias privadas, generándose un gasto de bolsillo que muchos hogares difícilmente pueden costear. Este representa un promedio de S/1,500 al año según detalla Rafael Cortez, investigador del Centro de Investigación de la Universidad del Pacífico.
Solo para contextualizar, no solo el 95% de establecimientos administrados por el Estado presentan una infraestructura y equipamiento inadecuado, detalla el “Análisis de los desafíos y oportunidades del Sistema Público de Salud”, elaborado por Videnza Consultores para ComexPerú. Del otro lado, el abastecimiento de medicamentos en el país también sigue representando un desafío significativo, donde solo para noviembre del año pasado, 62.7% era el promedio nacional de disponibilidad de medicamentos esenciales e incluso un grupo de 7 regiones tenía una disponibilidad menor al 40%, revela un informe técnico desarrollado por Arturo Granados, especialista en políticas públicas y César Amaro, consultor principal de Videnza Consultores y exdirector de Digemid.
Problema de fondo
Precisamente, para Amaro el problema de fondo radica en que no hay una sinergia entre lo que el médico receta y lo que el usuario recibe, una situación que se mantiene desde hace 30 a 40 años. “Hay un proceso que se llama prestación donde el médico ve a su paciente, prescribe una terapia y genera una data en una base de datos. Y hay un proceso diferente de logística y abastecimiento que tiene su ruta de cómo se manejan estos bienes. Lamentablemente, ambos procesos en el Estado no conversan”, explica el representante de Videnza. Así, pese a que el médico puede recetar de forma correcta, cuando el paciente se dirige a la farmacia a pedir su medicación no se la entregan o la entregan incompleta. “No hay un vínculo entre la receta y la logística. Esto es un problema de modelo, de paradigma que no estamos cambiando centrado en la oferta, en el inventario y no en el nivel de servicio que significa que el usuario reciba su medicación de manera efectiva”, agrega.
No obstante, tanto para Granados como Amaro, esta problemática estructural puede resolverse, pues el país tiene las capacidades para hacerlo y lograr que la población logre acceder a una mejor atención en el sistema de salud pública. ¿Cuáles son estas recomendaciones? Aquí algunas de las principales medidas señaladas por ambos especialistas:
- Enfocar el sistema en la entrega completa y oportuna de medicamentos. Emplear el indicador de nivel de servicio, midiendo la entrega completa y oportuna de los medicamentos recetados, comparándola contra el total de productos farmacéuticos prescritos.
- Transformar al Centro Nacional de Abastecimiento de Recursos Estratégicos en Salud (CENARES) en un comprador de excelencia. Fortalecer la capacidad de compra de CENARES para garantizar adquisiciones de medicamentos a escala y disminuir las compras institucionales o por desabastecimiento que realizan 291 unidades ejecutoras del Ministerio y Salud y los Gobiernos Regionales.
- Implementar Asociaciones Público-Privadas (APP) para la operación logística a nivel nacional. Evaluar, diseñar y poner en operación una APP en almacenamiento y distribución de productos farmacéuticos y dispositivos médicos para el Minsa -Gobiernos Regionales, innovando el modelo con una cláusula de seguridad para la población que active la responsabilidad de compra en el operador privado en el caso de que los compradores públicos tengan problemas al adquirir algún medicamento.
- Utilizar las farmacias privadas para la dispensación de medicamentos públicos para pacientes crónicos. Diseñar y poner en operación un programa de entrega de medicamentos para personas con enfermedades crónicas. La dispensación de medicamentos adquiridos por el sector público se realizaría a través de las farmacias privadas ubicadas cerca de los domicilios de los pacientes, mediante un acuerdo de retribución, sin invertir en locales ni en personal adicional.
- Implementar un sistema único de registro de prescripción, dispensación y uso de medicamentos. Avanzar hacia un sistema único de registro de existencias que ingrese hasta el consultorio (aplicativo) para tener en línea todos los ingresos y salidas de los medicamentos. Una opción es emplear la receta electrónica articulada al SIS, SISMED e idealmente al Sistema de Información de Historia Clínica Electrónica (SIHCE) del Minsa.