Con las primeras vacunas contra la COVID-19 ya en el Perú, es posible que entre la población surgan dudas sobre cómo funcionan o si son realmente seguras y eficaces para terminar con una pandemia que viene golpeando a todo el mundo hace más de un año. Las dudas son normales, pero se terminan con información de primera mano y escuchando a voces autorizadas. En SaludNiuz.pe hablamos con el doctor Ernesto Gozzer, médico salubrista y profesor de la Universidad Peruana Cayetano Heredia, quien pregunta a pregunta llevó a entender que hoy más que nunca debemos pensar en comunidad.
¿Es correcto cuando se dice que las vacunas son la mejor arma para terminar con la pandemia?
Las vacunas no son la única forma para terminar con la pandemia. Son un complemento a todas las otras medidas que ya se han implementado en el Perú y el mundo: el uso de mascarilla, la distancia de dos metros, la ventilación, no estar en lugar cerrados, evitar las aglomeraciones y el lavado de manos. A eso se le suma la vacunación porque de esa manera ya se completa el círculo y el organismo adquiere una capacidad de responder ante el ingreso del virus. Pero no es que una persona se vacuna y ya deja de ser un problema de salud pública, que son los que afectan a toda una población. Incluso es un problema de salud global.
¿Las personas vacunadas pueden seguir contagiando?
Es posible que las personas vacunadas se infecten, que el virus entre a su cuerpo, pero como están vacunadas no se enferman. Sin embargo, al tener el virus lo puede transmitir a otras personas. Por eso, es muy importante que cuando uno se vacuna siga con todas estas medidas, para no contagiar a los que aún no se vacunan.
"No hay una vacuna superior a las demás. Todas tienen sus ventajas y desventajas, pero lo más importante es que todas superan el 50% de eficacia, que es el mínimo que requiere una vacuna para tener un efecto en la salud pública".
¿La inmunidad es inmediata a la inyección?
No, las vacunas tienen un efecto protector a las enfermedades dos semanas después de la segunda dosis o 35 días después de haberse puesto la primera dosis. Por eso es que hay personas que se han puesto la primera dosis y aun así se contagian y enferman antes de la segunda dosis, al igual que personas que se contagian días antes de vacunarse e igual desarrollan la enfermedad.
¿Qué significa que las vacunas no sean eficaces al 100%?
Por ejemplo, con la vacuna de Sinopharm el 79% está protegido de enfermarse. Esto quiere decir que de cada 100 que se vacunen, 79 no se van a enfermar. Los otros 21 se pueden enfermar de una forma leve o máximo de una forma moderada. Casi todas las vacunas protegen al 100% de hacer formas severas y morir, aunque siempre hay una mínima posibilidad de que se presente algún caso.
¿Se puede decir que una vacuna es mejor que otra?
Lo que se puede decir que una vacuna es más eficaz que otra. Sin embargo, una vacuna también puede tener más efectos adversos leves que otra o ser más difícil de almacenar o distribuir por el tema del frío. Visto de esa forma, no hay una vacuna superior a las demás. Todas tienen sus ventajas y desventajas, pero lo más importante es que todas superan el 50% de eficacia, que es el mínimo que requiere una vacuna para tener un efecto en la salud pública.
"El objetivo de una vacuna no es proteger a una persona, es proteger a un grupo grande para que el virus tenga menos oportunidad de encontrarse con una persona que no está protegida y deje de transmitirse. Eso se llama inmunidad de rebaño".
Si le dan a elegir, ¿usted cuál se pondría?
Cualquiera. Aún no es mi turno para vacunarme porque no trabajo en un hospital. Estoy en otro grupo, pero me voy a vacunar con la que esté disponible en ese momento, sea Sinopharm, Moderna, Pfizer, Sputnik V o AstraZeneca. Todas suman para llegar a proteger al 90% de la población, que es el porcentaje necesario para la inmunidad de rebaño.
Esto nos obliga a pensar en comunidad y no individualmente.
Así es, el objetivo de una vacuna no es proteger a una persona, es proteger a un grupo grande para que el virus tenga menos oportunidad de encontrarse con una persona que no está protegida y deje de transmitirse. Eso se llama inmunidad de rebaño. Necesitamos que entre el 70 y 90% de las personas estén protegidas y para eso. Repito, todas las vacunas disponibles suman.
Las vacunas se han desarrollado en tiempo récord, ¿eso es seguro?
Es un miedo totalmente entendible. Lo que uno tiene que hacer es explicar cómo se ha logrado. Por ejemplo, las vacunas de ARN mensajero, que usa Pfizer y Moderna, es una tecnología nueva, pero se descubrió en 1962. En la década de 1980 se pensó que se podría incorporar a las células. En 2005, se descubrió que se podía introducir el ARN mensajero en capas de grasa muy pequeñitas y de esa manera entrar al cuerpo sin que lo dañe. Se comenzó a usar contra el MERS, que es un tipo de coronavirus, pero no se pudo probar la eficacia porque no había muchos casos. Cuando apareció el SARS-CoV-2 el año pasado, ya había amplias investigaciones científicas sobre este tipo de vacunas. Además, se han seguido todas las etapas: la fase 1 que mide sobre todo la seguridad, la fase dos que mide efectividad y la fase 3 en la que se prueba en grupos grandes en humanos.
¿Cuánto miedo hay que tenerle a los efectos secundarios?
Es muy bajo el porcentaje de vacunados que presentan estos efectos. Además, suelen ser leves: dolor en la zona de la vacuna, a veces hay un poco de fiebre, cansancio o quizás diarrea.
¿Y las reacciones alérgicas?
En el caso de Pfizer y Moderna, específicamente en Estados Unidos, se ha encontrado que las personas alérgicas tienen más riesgo a hacer una reacción severa o muy severa. Se hinchan o se les dificulta la respiración. Por eso, las personas deben quedarse un tiempo después de la inyección. Después de 30 minutos ya no hay peligro. Es importante aclarar que en Estados Unidos hay más frecuencia de alergias, eso está relacionado con la población de ese país, que las ha generado en mayor cantidad contra una serie de productos, químicos o compuestos.
¿Qué personas no deben vacunarse?
En este momento, los menores de 16 años porque la vacuna no ha sido probada en ellos. Se pide precaución con las gestantes, al menos que esté corriendo mucho riesgo como es el caso de las enfermeras. Las personas con enfermedades crónicas sí pueden.
"En el Perú hay personas con dudas más que anti vacunas. Lo que se debe hacer es informar, responder a todas sus preguntas con evidencia. Esto no pasa por ser más o menos inteligente. La gente tiene todo el derecho del mundo a dudar, por eso debemos explicar, explicar y seguir explicando".
¿En cuánto tiempo podemos hablar de volver a una vida normal?
El problema es la capacidad de producción de los laboratorios. Perú ha asegurado 48 millones de vacunas, pero no las tenemos. Si tuviéramos el lote completo en este momento, pienso que podríamos estar todos vacunados en seis meses. ¿De dónde obtengo ese cálculo? En el 2006, del 1 de octubre al 15 de noviembre, el país vacunó a 20 millones de personas contra rubéola y sarampión. El Perú ha eliminado muchas enfermedades en los últimos 30 años. Hay personal muy capacitado. El caso actual es más complejo, por eso pienso en un periodo mayor al caso que he citado.
¿Qué va a pasar con el virus una vez que se alcance la inmunidad del rebaño?
Es posible que se convierta en una enfermedad endémica, como un resfriado común. El virus va a estar ahí, cada cierto tiempo aumentarán los casos y luego van a caer. También se espera tener vacunas que puedan protegernos de variantes o cepas de este virus. Una sola vacuna para todos los tipos. Las tecnologías permiten actualizar rápidamente. Eso es bueno porque aún no se conoce el tiempo de inmunidad que dan las dosis. Además, también vamos a tener tratamientos.
¿Cómo terminar de convencer a quienes tienen miedo de vacunarse?
Yo soy muy optimista en ese aspecto. En el Perú hay personas con dudas más que anti vacunas. Lo que se debe hacer es informar, responder a todas sus preguntas con evidencia. Esto no pasa por ser más o menos inteligente. La gente tiene todo el derecho del mundo a dudar, por eso debemos explicar, explicar y seguir explicando. El Ministerio de Salud debe lanzar campañas explicando el tema de diferentes maneras, para distintos públicos, porque todos tenemos formas diferentes de ver las cosas.











