Dormir con tu mascota puede generar beneficios, tanto para ti como para ella. Sin embargo, los expertos advierten que también es necesario tener en cuenta los aspectos negativos. Es posible, por ejemplo, que no se obtenga un sueño de calidad, sobre todo en personas con insomnio o en pacientes con otros trastornos del sueño. Por supuesto, también es clave evaluar los problemas respiratorios que pueden causar perros y gatos.
Beneficioso para algunos de nosotros (y ellos)
"Las personas con depresión o ansiedad pueden beneficiarse de tener a su mascota en la cama porque la mascota es una almohada grande, una manta grande, y pueden sentir que esa criatura peluda, tierna y cómoda disminuye su ansiedad", dijo a la CNN el especialista en sueño, el Dr. Raj Dasgupta, profesor asistente de medicina clínica en la Escuela de Medicina Keck de la Universidad del Sur de California.
"El sueño de los perros y gatos no es continuo e inevitablemente se levantarán y caminarán sobre la cama, pisando a las personas. Toda esa actividad conducirá a la fragmentación del sueño". Dr. Vsevolod Polotsky, director de investigación del sueño y profesor en el departamento de medicina de la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins.
Así mismo, "los perros y gatos que están más estrechamente vinculados con sus seres humanos obtienen beneficios adicionales para la salud, incluido un aumento de los neurotransmisores beneficiosos como la oxitocina y la dopamina, las hormonas del bienestar", añadió la Dra. Dana Varble, directora veterinaria de la Comunidad Veterinaria de Norteamérica.
Desventajas a tener en cuenta
"Los animales pueden moverse, ladrar e interrumpir el sueño. El sueño de los perros y gatos no es continuo e inevitablemente se levantarán y caminarán sobre la cama, pisando a las personas. Toda esa actividad conducirá a la fragmentación del sueño", dijo el Dr. Vsevolod Polotsky, director de investigación del sueño y profesor en el departamento de medicina de la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins. Salir del sueño profundo se ha asociado con la liberación de la hormona del estrés, el cortisol, que puede empeorar el sueño.
"Es particularmente dañino en personas con insomnio o en pacientes con otros trastornos del sueño: pacientes con fase retrasada del sueño (noctámbulos) o incluso en personas con apnea del sueño, que se despiertan con la interrupción de la respiración y que luego no pueden volver a dormirse", agregó.
Por otro lado, Dasgupta dice que si sufres de asma, alergias o alguna enfermedad pulmonar obstructiva crónica, dormir con una bola de pelo podría convertirse en una pesadilla. "Recuerden, así el perro no mude pelo, los alérgenos están en la saliva, están en la piel del perro. Así que estarán expuestos a los alérgenos durante ocho horas por la noche y padecerán ojos llorosos y congestión nasal. Eso, junto con el movimiento del animal, podría impedirle dormir bien".
El psicólogo clínico y especialista en sueño Michael Breus, recomendó que si estás pensando en llevar a tu bebé peludo a la cama, lo pruebes solo un par de noches, para no condicionar a tu mascota, antes de decidir si es bueno para ti.