Una bacteria llamada wolbachia se ha convertido en la esperanza para combatir el dengue. En un experimento realizado en la ciudad de Yogyakarta, Indonesia, científicos descubrieron que los mosquitos Aedes aegypti eran menos susceptibles a convertirse en portadores del virus del dengue si eran infectados previamente con esta bacteria, reduciendo en un 77% el contagio en las personas y un 86% las hospitalizaciones por causa de la enfermedad.
El ensayo utilizó cinco millones de huevos de mosquitos infectados con wolbachia. Los huevos se colocaban en cubos de agua en la ciudad cada dos semanas y el proceso de creación de una población infectada de mosquitos tomó nueve meses. Yogyakarta se dividió en 24 zonas y los mosquitos se liberaron solo en la mitad de ellas. Todos los grupos aplicaron medidas locales de control de mosquitos como de costumbre.
"Creemos que puede tener un mayor impacto cuando se aplique en grandes ciudades de todo el mundo, donde el dengue es un inmenso problema de salud pública".
Los resultados fueron publicados en el New England Journal of Medicine. "Creemos que puede tener un mayor impacto cuando se aplique en grandes ciudades de todo el mundo, donde el dengue es un inmenso problema de salud pública", explicó la doctora Katie Anders, directora de evaluación de impacto del Programa Mundial del Mosquito. "Es revolucionario y muy emocionante, es mejor de lo que esperábamos, para ser sincera".
La wolbachia no le hace daño al mosquito, pero se situa en las áreas de su cuerpo por donde el virus del dengue suele penetrar. Las bacterias compiten por los recursos y dificultan la replicación del virus del dengue, por lo que es menos probable que el mosquito cause una infección cuando vuelva a picar.
Además, la wolbachia es transmitida a la siguiente generación de mosquitos. Lo que quiere decir que una vez que se establezca, debería perdurar durante un largo tiempo y continuar protegiendo contra las infecciones de dengue.











