Es normal sentir ansiedad en algún momento de la vida. Sin embargo, es importante prestar atención cuando estos episodios se vuelven frecuentes e interfieren en las actividades diarias. Los síntomas pueden empezar en la infancia o la adolescencia y continuar hasta la edad adulta.
¿Qué es la ansiedad?
El portal de Mayo Clinic explica que los en los trastornos de ansiedad se dan episodios repetidos de sentimientos repentinos de ansiedad intensa y miedo o terror que alcanzan un máximo en una cuestión de minutos (ataques de pánico). Estos sentimientos son desproporcionados en comparación con el peligro real y pueden durar un largo tiempo.
¿Cuáles son los síntomas?
Los signos y síntomas de la ansiedad más comunes incluyen sensación de nerviosismo, agitación o tensión, sensación de peligro inminente, pánico o catástrofe, aumento del ritmo cardíaco, respiración acelerada (hiperventilación), sudoración, temblores, sensación de debilidad o cansancio, problemas para concentrarse o para pensar en otra cosa que no sea la preocupación actual, así como problemas para conciliar el sueño o padecer problemas gastrointestinales.
¿Qué tipos de ansiedad existen?
Mayo Clinic agrega que hay varios tipos de ansiedad, entre ellos la agorafobia (temor a lugares y situaciones), la fobia social (miedo o rechazo a situaciones sociales), las fobias específicas (miedo a un objeto o situación específica) o el trastorno de pánico (miedo o terror intensos que alcanzan un nivel máximo en minutos). Además, para algunas personas, la ansiedad puede estar relacionada con un problema de salud oculto.
¿Cuándo buscar ayuda?
Cualquiera sea el tipo de ansiedad que padezcas, un tratamiento puede ayudar, sobre todo si sientes que te estás preocupando demasiado y que esto interfiere en tu trabajo, tus relaciones y otros aspectos de tu vida. Busca ayuda inmediatamente si tienes pensamientos o conductas suicidas.











